CONSEJOS DE UN HOMBRE QUE HA BAJADO A LOS INFIERNOS

Nunca pises al débil, eso debilitará tu espíritu y te hará débil a ti: mañana podría pisarte algún capullo.

Nunca te rías del que es diferente, la diversidad forma parte de la naturaleza y el universo ama la diversidad: no vayas contra el universo, pues es ir contra la vida.

Nunca le digas a nadie lo que tiene que hacer: no interfieras en el destino.

Nunca dejes que nadie te diga lo que tienes que hacer: no dejes que interfieran en tu destino.

No odies a nadie: el odio es un lastre.

No temas a nada: el miedo es una prisión.

Nunca te cases.

Nunca pienses por otro ni imagines lo que pasa por sus cabezas: la psique es un instrumento complejo.

Nunca saques conclusiones precipitadas ni te adelantes a los acontecimientos: deja que la vida fluya. 

No sufras ni te preocupes por acontecimientos externos: la vida es corta.

No todo es tan bueno como parece. No todo es tan malo como parece: el mundo depende siempre del que mira. 

Piensa siempre antes de hablar, las palabras son punzones envenenados. 

No te alegres demasiado por las cosas buenas. No te entristezcas demasiado por las cosas malas: el universo es una balanza, equilibrio, no entiende del bien y del mal. No juegues a la dualidad.

No evites el sufrimiento, pues tarde o temprano llegará. Cuanto antes llegue y te hundas en él para comprender su esencia, mejor.

No persigas la felicidad, pues la felicidad huye de quienes la persiguen. Persigue la serenidad y la justicia. 

Haz siempre el bien, incluso cuando creas que otros hacen el mal: son sus espíritus los que se pudren, pero no dejes que se pudra el tuyo. El ojo por ojo no es un buen camino.

Di lo que piensas y sientes en cada momento, mañana puede ser tarde.

No engañes a quien quieres, pues te engañas a ti mismo.

No te engañes a ti mismo, pues sufre quien te quiere, pero el peor damnificado eres tú. 

No hagas daño a ningún animal, ellos también poseen espíritu.

Y sobre todo recuerda siempre lo que dijo una vez un genio: ningún pedazo de culo en el mundo vale más de 50 dólares.