LA CHICA DE LOS OJOS AZULES

Nunca creí que pudiera perderme en unos ojos hasta que vi los suyos,

Si es que eran suyos.

Yo ya había visto aquellos ojos antes, en alguna parte, en alguna vida,

Ya me había perdido en ellos.

Aquellos ojos eran el portal hacia otra dimensión, un atisbo de presencia.

Era el fulgor de las estrellas enmarcado en una cara.

Somos polvo de estrellas

Y ella lo sabía,

Porque las tenía en los ojos.