La estrella que más brilla, brilla muy poco a tu lado,
El fuego que más calienta se hiela al verte llegar
Y se encienden las luciérnagas con la llama del Olimpo.
Artemisa tira el arco y se arrodilla ante ti,
Al mismo Zeus le tiembla el rayo en la mano
Y Hefesto deja de forjar.
Atenea ya no quiere guerra, al verte busca la paz.
Hermes ya no avisa a nadie, ya nadie más tiene que llegar.
Sirve ambrosía un zagal
Y los dioses expectantes admiran verte pasar,
Adoran tu caminar.
Las musas yacen sentadas,
Calíope se echa a llorar y a Euterpe se le cae la flauta,
Poseidón sale del mar, porque hoy por vez primera hay una cosa más bella en la tierra que en su hogar.
Carente no cruza ya con su barca a ningún muerto,
Se congelaron la Estigia, el Cocito y el Aqueronte
Cuando escucharon tu nombre.
El cielo se volvió blanco,
Cubriste a Hades con un manto,
Tú eres la vida y la muerte,
Las estrellas y los astros.
Tú eres mi luz y mi guía,
Mi fuente, mi aliento, mi mayor tesoro.
Tú para mí lo eres todo,
El mundo existe por ti.
